El objetivo de practicar mindfulness en la vida diaria es para que tomes conciencia del momento presente, de lo que estás haciendo y cómo lo haces, de cómo te sientes e intentes acceder a todos y cada uno de tus sentidos y los utilices con atención plena.
Mindfulness en inglés, es la práctica de prestar atención a nuestra experiencia del momento presente, ya sea a través de la vista, un sonido que escuchamos, un sabor nuevo para nuestro paladar, un olor dulce, una sensación en el cuerpo o una actividad mental (esto último incluye emociones y pensamientos).
Prestar atención plena a lo que haces aquí y ahora, evitando hacerlo por inercia con el piloto automático, te ayudará a conocerte mejor, tener más claro lo que deseas, y aprender a cómo vivir cada día conectada a tu conciencia del momento presente con más autenticidad, aceptación y tranquilidad.
Mindfulness se puede practicar dentro o fuera de la meditación formal. La meditación es una técnica para practicar la atención plena en un entorno estructurado; pero se puede practicar también mientras realizas tus actividades habituales. Esto es lo que te propongo experimentar hoy.
¿Te ha pasado que vas conduciendo y has llegado al destino final sin haber prestado atención a la carretera? Ya la conoces y vas con el piloto automático. Luego aparcas el coche, lo cierras, pero cuando llegas a casa tienes dudas de si has cerrado el coche o no. ¿Te ha pasado esto o algo similar?
Cuando hacemos actividades rutinarias, nuestra mente tiende a desconectarse del presente y se va al pasado o futuro, luego enciende el piloto automático.
A todos nos pasa. El problema es cuando pasa muy a menudo y te das cuenta que la vida te pasa volando sin haber estado en el aquí y ahora.
Afortunadamente, todos los días están llenos de oportunidades para llamar nuestra atención sobre el momento presente, solo se trata de hacer un esfuerzo consciente.
A continuación te comparto:
- Uno de los beneficios de practicar la atención plena fuera de la meditación,
- Y un ejercicio para practicar mindfulness en tu día a día.
Para, respira y vuelve a tu tarea con atención plena
Al vivir en el momento con atención; sin juzgar ni analizar; aceptando el momento presente tal cual es; prestando atención a tus sentidos; a los pequeños detalles y a ti misma en cada actividad, comenzarás a ver los beneficios de practicar la atención plena.
Uno de ellos es que le da a la mente un descanso de nuestra fijación en el pensamiento discursivo, es decir del parloteo incesante, agotador y rara vez productivo. La mente tiende a detenerse en pensamientos estresantes sobre el pasado y el futuro. Sacar a nuestra mente de nuestras historias y traerla al momento presente tiene como resultado un alivio de estos patrones de pensamientos estresantes y habituales.
Ejercicio: La alarma
Para empezar a practicar mindfulness en tu vida diaria te propongo poner una alarma varias veces al día para que te recuerde la importancia de parar, respirar conscientemente y volver a poner atención a la tarea que estás haciendo en ese momento.
Puedes utilizar la alarma del móvil y programarte las veces que desees, un mínimo de 3 o 4 veces estaría muy bien. Elige en función de tu nivel de capacidad actual para concentrarte en el aquí y ahora. Si es algo que te cuesta mucho, pues ya sabes programa la alarma más veces.
El objetivo de este ejercicio cuando suene la alarma es:
- DETENTE y OBSERVA. Toma conciencia de como se siente tu cuerpo, que postura estás adoptando y que se está cociendo en tu cabeza.
- OBSÉRVATE DESDE FUERA. En vez de quedarte atrapada en tu mente, sal de ella y mírate desde fuera, como si estuvieras viendo una película y tu eres la espectadora.
- RESPIRA conscientemente. Tu respiración es una herramienta muy poderosa. Cuando lo haces conscientemente te ayuda a relajar y a conectar con tu cuerpo y volver al momento presente.
- RETORNO: Vuelve a poner atención plena a la tarea que estás haciendo.
- CONCIENCIA: Toma conciencia del momento presente
- CONECTA. Observa como te sientes. Que sensaciones hay en tu cuerpo. Por ejemplo si la alarma te pilla que estás limpiando los dientes, pon atención a los movimientos que haces con la mano, al gusto y textura de la pasta de dientes, a la dureza del cepillo, etc. Si la alarma te pilla que estás concentrada con la tarea, pon atención a la postura de tu cuerpo, porque muchas veces lo tenemos tensionado por estar en una mala postura y manteneros en ella largo tiempo. Puedes fijarte en como estás respirando. Es algo que hacemos siempre pero muy pocas veces le prestamos atención. Observa como te sientes, que emociones tienes, conecta contigo misma, lo que haces y cómo lo haces.
Verás que la mente enseguida se vuelve a enganchar a pensamientos, sobretodo si estás haciendo una tarea rutinaria como limpiarte los dientes, ducharte, fregar platos…
Al tratarse de algo habitual la mente pone el piloto automático. Acéptalo, no te juzgues, no te enfades, y vuelve a conectarte en el aquí y ahora, con lo que estás haciendo, con tu respiración, con tu cuerpo. Indiferentemente de si te gusta o no esa actividad, el objetivo es poner atención plena mientras la haces.
No se trata tanto de forzarte a estar atenta siempre al 100%, sino practicar volver a la tarea con atención plena cuando la mente se distrae, y tomar conciencia de como te sientes. Consiste en vivir esos momentos de presencia absoluta, y experimentar la calma y paz que te traen, aunque sea solo por unos instantes. El objetivo es tener y disfrutar más de esos momentos a lo largo del día.
SIEMPRE ten presente:
- Volver de nuevo a tu respiración. Inhalar y exhalar es un mecanismo que te fue dado para respirar oxígeno, conectar y estar presente. Utilízalo mucho y con profundidad. La respiración es la técnica más efectiva del minfulness. Cuando le ponemos atención y conciencia nos ayuda a relajarnos y a estar presentes, reduce el estrés y por tanto aumentamos nuestro nivel de focalización.
- Observar y dejar pasar los pensamientos sin identificarte con ellos, sin sentir frustración, o pensar que lo estás haciendo mal.
- Y recordar no juzgar ni analizar nada. Aceptar el momento presente tal cual es te ayudará a ser más creativa, y a pasar a la acción de una manera efectiva y no reactiva.
Puedes preguntarme cualquier cosa abajo en comentarios del post, o simplemente explicarme tu experiencia. Te animo a hacerlo, es una manera de interactuar conmigo y las demás personas que hagan este ejercicio.
Una vez hagas el ejercicio, dime: ¿te ayuda a pillar tu mente y estar más presente?
Disfruta practicando y verás que cada día experimentas un poco más.
Recuerda, ¡hoy pon la alarma!. Be Mindful y ¡Vuélvete Vigorosa Sexy Sana!
Con cariño,

«Si quieres dominar la ansiedad de la vida, vive el momento, vive en la respiración» – Amit Ray

Ejercicio de mindfulness con tus cinco sentidos, te animo a leerlo y practicarlo aquí. Te toma 5 minutos y así empiezas a practicar más Mindfulness. Y si quieres profundizar en la práctica, puede que te interese leer los 7 Ejercicios de Mindfulness para empezar el día con buena onda.

Hola.
Me pasa que hago ejercicios de conectarme, autobservar el pensamiento o emocion negativa, tratando de no identificarme con ellos. Pero cuando tomo consciencia, es como que el pensamiento o emocion tomará más fuerza. Mientras más consciente, más fuerte entra la angustia. Me explico que esto puede ocurrir porque no tengo la costumbre de vivir en el presente, y como es algo nuevo, puede surgir esa angustia. Llevo un mes en un proceso de tomar consciencia real, y a la vez ha sido de mucho miedo y dolor. Pero lo agradezco porque sé que vendrá algo muy bueno. A veces me impaciento, me pregunto cuando va a detenerse el dolor y quiero que pase pronto, y luego me digo que lo deje fluir e intento entregarme a la situación, agradeciendo a la vida que me permita vivirlo. Me imagino que el crecimiento se acompaña de dolor, lo asimilo a cuando a los niños le crecen los dientes. Bueno, si me puedes aclarar si es normal que puedan coexistir el miedo, angustia y paz a la vez, y si esto es el inicio del proceso.
Muchas gracias por toda la información que compartes, me ayuda mucho.
Hola Pia, siento que no he visto tu mensaje hasta ahora. No se había publicado porque fue a la bandeja de la papelera, y lo he encontrado hoy. Contestando a tu pregunta, pues lo describes muy bien, y sí, es así. Yo sentí exactamente esto tal cual lo cuentas cuando inicié mi viaje. Y es que cuando nos hemos pasado toda la vida distraídas precisamente para no sentir el dolor, pues luego booooom, viene de golpe. Aunque siempre ha estado allí, en el momento que tomas conciencia y le prestas atención, pues se siente a flor de piel, y se siente mucho miedo, angustia y a la vez puedes sentir paz porque de alguna manera estás permitiendo que ese dolor empiece a salir, a poder liberarse, y dejar de retenerlo como has hecho hasta ahora. No queda otra que escucharlo, abrazarlo, y ver hacia donde te lleva. Es como entrar en un túnel oscuro que no se sabe a donde te lleva y cuando terminará. Lo único que puedo decirte es que por muy doloroso que sea, por mucho miedo que te de, sí, ese es el camino y es el camino de tu liberación. Al final del túnel, por muy largo que sea siempre hay la luz, pero es importante que encuentres la ayuda y las herramientas necesarias para que puedas sobrellevarlo y no abandonar. No es un camino fácil, por eso la mayoría de personas deciden no emprenderlo y seguir distraídas para no sentir el dolor, pero esto no las libera, las atrapa mucho más. Pia sigue caminando, inhalando y exhalando muy profundo…. y sobretodo, encontrando la ayuda necesaria. No dudes en contactarme a info@elisabetmarine.com, si necesitas hablar en privado. ¡Un abrazo!