Si has intentado bajar de peso y fracasado en el intento, ya sabes lo frustrante y desalentador que puede llegar a ser.
Si tu historia es que has probado muchas dietas, pero los resultados no llegaron nunca a durar en el tiempo, estoy segura que te interesará seguir leyendo.
No importa que dieta sigas, por muy famosa y prometedora que sea, hay una gran posibilidad de que recuperes el peso perdido, incluso a veces aumentes más.
Todas estas dietas que tienes que seguir a raja tabla y te prometen perder mucho peso en poco tiempo ¡no funcionan!. Y no es por tu culpa.
Entiendo perfectamente que puedas caer en la tentación de perder peso rápidamente. Lo único que buscas es sentirte cómoda con tu propio cuerpo.
Si llevas tiempo siguiendo dietas con resultados pésimos, no me extrañaría oír que has perdido la motivación e incluso te sientas deprimida. Eso no ayuda en el proceso de sentirte bien contigo misma, al contrario seguir una dieta puede acabar con tu alegría. Y si además para mantener el peso la tienes que seguir el resto de tu vida, volviendo a empezar cada lunes sintiéndote super culpable por haberla saltado el fin de semana….Uf eso no es vida, ¡es una tortura!.
Las dietas son muy efectivas para hacerte sentir culpable, además de hacerte sentir cansada, malhumorada, y tentada por lo que no puedes comer.
Lo peor de seguir una dieta es que hace que tus antojos se multipliquen y los desees más que nunca, cayendo en el pecado de consumir los alimentos prohibidos una y otra vez, lo que te hace sentir más y más culpable cada vez.
Así el pecar una sola vez se convierte en pecar durante un día entero, luego un fin de semana entero, luego una semana entera, y finalmente es cuando abandonas y aceptas que es insostenible hacer dieta el resto de tu vida.
¿Fracasaste?
¡No claro que no! Por favor quiero que te dejes de sentir culpable ahora mismo, si ese es tu caso.
Tienes que saber que el 95% de las personas que siguen una dieta, no llegaron a perder todo el peso deseado , y de hecho aumentaron de peso, más del que tenían al iniciar la dieta. Así que solo el 5% que siguen una dieta tiene resultados exitosos.
Luego lo de tener que contar calorías ¡es una locura!. Se puede llegar a convertir en una obsesión, haciendo que en vez de disfrutar de la comida, solo veas y cuentes calorías por todas partes.
Las calorías no importan, ¡deja ya de contar! Clic para tuitear
Y eso no quiere decir que tengas que aumentar la porción de comida, pensando que puedes comer ilimitadamente porque lo de contar no importa. No es eso. Debes comer lo que tu cuerpo necesita, y la razón de que puedas perder peso sin tener que preocuparte por las calorías que consumes, es porque una de las falacias más grandes en la nutrición es pensar que todas las calorías son iguales.
Los alimentos afectan a nuestro cuerpo de diferentes maneras y pasan por diferentes vías metabólicas, además pueden afectar directamente las hormonas que regulan cuándo y cuánto comemos. Por lo tanto, los tipos de alimentos en que basamos nuestra dieta son tan importantes como la cantidad de calorías que estamos comiendo.
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Lo que realmente importa es lo que tu cuerpo hace con la comida que comes.
Si por ejemplo comes un aguacate, un alimento natural sin aditivos y conservantes, tu cuerpo lo identifica, lo digiere bien, distribuye los nutrientes, mejora el funcionamiento de tu cuerpo, y hace aumentar el metabolismo en el proceso.
Si por el contrario comes un snack con aditivos como el azúcar, conservantes y quien sabe que más (porque ni siquiera entendemos la lista de ingredientes), pasa que tu cuerpo no lo reconoce como alimento natural. No sabe como digerirlo, no sabe como va a mejorar en el funcionamiento de tu cuerpo, no reconoce nutrientes ya que eso no es comida de verdad. Tu cuerpo no sabe como procesarlo, y entonces te engorda, acaba almacenándose como grasa en los sitios que menos deseas, indiferentemente de que fuera bajo en calorías.
Así que todos esos productos que se comercializan con el marketing de 0 calorías, bajo en grasa, light, 100% natural.., pero llenos de aditivos, conservantes, y químicos, son engañosos, y producen el efecto contrario. Engordan más, ya que el cuerpo no los reconoce, ni los digiere bien, y se convierte en grasa, además de poder crear enfermedad en tu cuerpo.
Es muy fácil caer en la trampa de estos productos, ya que están creados para hacerte creer que no engordan porque tienen menos calorías, y el marketing utilizado es convencerte de que son más saludables, pero precisamente es todo lo contrario.
De hecho tu cuerpo, al comer estos productos procesados, los almacena en forma de grasa para proteger los órganos de tu cuerpo, es como un mecanismo de supervivencia que se activa cada vez que ingieres comida no identificada como natural.
Así que te animo a entrar en tu cocina y leer todo los ingredientes de todo lo que tienes. Si hay productos con ingredientes que solo un químico puede entender, mejor déjalos de consumir. Lo que tu cuerpo necesita es comer comida de verdad, ni light, ni 0 calorías, ni baja en grasa, ni nada de eso.
Lo que tu cuerpo necesita son alimentos de la madre tierra que vengan sin envase de plástico y sin lista de ingredientes.
Si no entiendes los ingredientes que lleva un alimento, mejor no lo consumas. Clic para tuitear
Dicen que lo que no mata engorda. En este caso, engorda y mata lentamente, ya que consumir estos productos te hace envejecer más rápido y crear enfermedades a la larga.
La clave para mantener la salud y el peso natural esta en comer alimentos de la madre tierra en las combinaciones correctas, manteniendo el nivel de azúcar en la sangre estable. Ya que si el nivel es alto, se convierte en insulina, una hormona que almacena grasas, y cada vez que se libera, tu cuerpo almacena más.
Cuando tu cuerpo libera demasiada insulina, no solo te engorda, también te hace caer los niveles de glucosa en la sangre, lo que te hace tener hambre, sentirte miserable, y comer más alimentos azucarados y procesados.
Con una alimentación saludable, consigues un peso saludable
Todo lo que necesitas es la información correcta.
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Con cariño,
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